Como ya sabéis, se acerca Halloween, y es una buenísima época para deliciosos dulces.
Hoy, os voy a enseñar el primer dulce de mi temporada de halloween, aunque también sirve para una bonita celebración otoñal. Las calabazas son muy propias de este tiempo.
Para hacer los cake-pops, no utilicé la técnica de siempre, sino un molde de la marca Lékue que me regalaron para mi cumpleaños y aún no había tenido la ocasión de emplear.
- Primero preparé la masa del bizcocho:
- Después con un aplicador, se echa dentro del molde, y se cierra:
- A continuación se hornea, se deja enfriar, le ponemos los palitos con un poco de chocolate fundido y se meten en la nevera a enfriar:
- Después los bañé en chocolate blanco fundido con un poco de colorante naranja:
- Para finalizar, hice un poco de crema de mantequilla firme, con colorante verde, y utilizando una manga pastelera y una boquilla especial, les hice unas hojitas:
¿Qué os parecen?
Y por dentro ..... deliciosos:
Y vosotros, ¿preparáis algo para Halloween?
Si vais a celebrar una fiesta terrorífica y queréis sorprender a vuestros invitados con unos deliciosos dulces de truco o trato, sólo tenéis que encargármelos.
¡Hasta la próxima!
¡¡Ay qué bonitos!!. ¡¡Y qué buena pinta tienen para comerlos!!. Seguro que están riquísimos. A ver si conseguimos que tengan más salida. Noli.
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